Las termitas son insectos sociales que viven en colonias. Dentro de una misma colonia pueden vivir miles, e incluso millones de ejemplares. Hay diversos factores que influyen en el número de termitas, entre los que encontramos: la especie, el lugar geográfico, el clima…
Generalmente, se tiende a pensar que estos animales viven en grupos no muy grandes, pero la realidad difiere completamente de este pensamiento erróneo. Por ello, para que hoy conozcas más a fondo este tema, venimos a hablarte sobre las colonias de termitas: cuánto trabajan estos insectos, cómo funciona una población, la cantidad de tiempo que pueden pasar en un mismo sitio… Así que, sin más dilación, empecemos hablando del tiempo que se pasan trabajando las termitas.
Cuánto trabajan las termitas
Las termitas cumplen una función imprescindible en el medio ambiente, como lo es la aceleración del ciclo natural mediante la descomposición de desechos. Este rol es de crucial importancia, ya que son de gran ayuda para volver a darle vitalidad a muchos ecosistemas que estaban prácticamente muertos.
El problema de las termitas es que no diferencian entre la madera de un árbol caído e inservible, o la que conforma el mueble de la televisión de tu salón. Estos insectos se alimentan de la celulosa que se encuentra en la propia madera, por lo que para las termitas todo lo que sea o esté hecho de este material es una fuente de alimento.
Además, las termitas tienen una característica fascinante que la convierte en un insecto muy especial, ya que son capaces de trabajar prácticamente todo el tiempo. Por supuesto, esto es una pésima noticia para aquellos que sufren una infestación de termitas, debido que el coste de la reparación de los daños de dicha plaga aumenta por cada segundo que pasa.
No obstante, hay un factor que tiene gran influencia en el trabajo de las termitas: la temperatura. Las termitas son insectos ectotérmicos, es decir, su temperatura corporal depende de la que proporcione el medio. Esto hace que los climas que sean más fríos y secos sean peores para ellas, mientras que los climas más templados son ideales para las termitas.
Cómo funciona una colonia de termitas
Otra de las características de estos insectos es que conforman grupos poblaciones mucho más complejos de lo que se puede llegar a pensar en primer momento.
En su estructura, se distinguen diferentes castas, cada una con roles específicos. Las termitas obreras, que conforman la mayoría de la colonia, se encargan de la construcción y mantenimiento del nido, así como de la búsqueda de alimento y el cuidado de las crías. Los soldados, con mandíbulas poderosas, protegen la colonia de posibles amenazas. Las termitas reproductoras, incluyendo la pareja real y los neoténicos, son responsables de la reproducción y la expansión de la colonia.
La comunicación entre las termitas se lleva a cabo principalmente a través de feromonas y vibraciones corporales. Esto les permite coordinar sus actividades y mantener la cohesión dentro de la colonia.
La cantidad de individuos en una colonia puede variar ampliamente dependiendo de la especie y las condiciones ambientales, pero algunas colonias pueden albergar hasta varios millones de termitas. Este alto número de individuos facilita la eficiencia en la búsqueda de alimento y la defensa del territorio, aunque también puede representar un desafío para el control de plagas en caso de infestaciones en estructuras humanas.
Cuánto tiempo permanece una colonia en el mismo lugar
Una de las preguntas más típicas referidas a este tema, en especial en casos de plagas, es cuánto tiempo pueden llegar a pasar las termitas en el mismo sitio. Esta pregunta no tiene una única respuesta válida para todos los casos, debido a que esto varía considerablemente según diversos factores, como la especie de termita, el tamaño de la colonia, las condiciones ambientales y la disponibilidad de alimento. Por lo general, podríamos afirmar que las colonias de termitas pueden establecerse en un lugar durante períodos prolongados, que van desde varios años hasta décadas, e incluso más en casos excepcionales.
Las termitas construyen estructuras subterráneas complejas, como galerías y túneles, que pueden ser bastante duraderas si cuentan con una fuente continua de alimento y las condiciones ambientales son favorables. Además, las colonias de termitas pueden expandirse y establecer subcolonias secundarias en áreas cercanas, lo que les permite adaptarse a cambios en el entorno y continuar prosperando.
Sin embargo, es importante destacar que las termitas son sensibles a los cambios en su entorno, como la perturbación del hábitat o la falta de alimento. En tales casos, las colonias pueden abandonar un área y buscar un nuevo lugar para establecerse. Además, las intervenciones humanas, como los tratamientos de control de plagas de termitas, pueden afectar la supervivencia y la permanencia de una colonia en un lugar determinado.